Disciplina Positiva
La Disciplina positiva (DP) es una metodología educativa que tiene sus orígenes en la Psicología Adleriana y en la teoría educativa de Dreikurs. A partir de los años 80, dos investigadoras norteamericanas -Jane Nelsen y Lynn Lott- sistematizaron estos principios creando un modelo educativo cuyo objetivo consiste en comprender qué se esconde detrás de la raíz del comportamiento humano para poder ofrecer a las familias y educadores herramientas y recursos que les permitan enseñar a los niños y adolescentes habilidades para la vida , desarrollando así su potencial.
La DP se caracteriza por defender un enfoque que rechaza tanto los modelos educativos totalmente permisivos como los autoritarios y se centra en ser amable y firme a la vez para establecer relaciones personales basadas en la cooperación y conexión entre niños y adultos. Esta metodología se enfoca en soluciones con el objetivo de educar a largo plazo y enseñar a los menores competencias sociales y de vida respetuosas.
La DP se fundamenta en los siguientes principios:
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Es amable y firme a la vez.
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Fomenta las relaciones horizontales. Sentido de comunidad.
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Se basa en el respeto mutuo (por uno mismo, por los demás y por las circunstancias de la situación).
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Empodera a las personas. Se enfoca en alentar.
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Se centra en soluciones, no en castigos ni en premios.
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Asume que los errores son oportunidades de aprendizaje.
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Educa a largo plazo.
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Se sustenta en el sentido de pertenencia y conexión.